De borondo por el Amazonas descubriendo su magia
Por: Yuliana Solis Caicedo Genio Viajero 2019 – 2020 @yusocatraveler Deseaba tanto volver al Amazonas, que gracias a que ahora soy “Genio Viajero” de @YourTravelAgencia, fue posible. A continuación les traigo los detalles de esta súper aventura y juntos descubriremos ¿cuál es el encanto del Amazonas?. Leticia: el abrebocas del Amazonas En Leticia inició esta aventura, donde descansé en una maloka ubicada cerca del parque Santander. Al recostarme en mi hamaca pude descansar con los sonidos de la madre naturaleza que invita a pájaros e insectos a arrullarnos con sus cantos. Navegando en el Amazonas: Ver el río Amazonas en cada recorrido es impactante, la gran amplitud que tiene y la belleza del contraste entre el azul del cielo, el agua café, el verde que lo bordea y de repente sumarle un delfín gris o rosado en frente tuyo, hacen de éste un paisaje que enamora y te invita a agradecer por tener el privilegio de tocarlo y sentirlo. En esta ocasión recorrí este maravilloso río en barco, lanchas rápidas y artesanales, kayak e incluso nadé en una zona y créanme: gran parte del encanto del Amazonas es su río, porque es una fuente de vida y de ahí su importancia, ¡somos todo gracias al agua y por eso debemos protegerla!. Recorrer el Amazonas en kayak es una experiencia única que recomiendo para sentir el río y dejarte deslumbrar por el paisaje y si estas de suerte, verás el mejor atardecer sobre sus aguas. Esta actividad la realicé saliendo del Hotel Amazon de On Vacation y costó $60.000 con el operador que se encuentra ahí. El misterio de la selva: El Amazonas implica aventurarte a disfrutar de la selva, arriesgarte a cruzar bosques con árboles de todo tipo de tamaños, sentir la tierra, aprender a convivir con los animales en su hábitat natural y disfrutar de los sonidos y el misterio que esconden, al no saber qué o quién los produce. La selva es una de día y otra de noche, los sonidos cambian, los animales se sienten libres y hay mayor actividad. La noche selvática se hizo para agudizar nuestros oídos y disfrutar de cada sonido, por suave que se sienta, porque representa la biodiversidad que tenemos alrededor. Finalmente, si cuentas con suerte podrás disfrutar del mejor cielo estrellado para dar un cierre perfecto a tu aventura. Me gustó ver aves y micos circulando por senderos o árboles en los lugares que visité, incluso sin adentrarme en selva virgen ya podía sentir la energía del Amazonas. Cuando pienso en el Amazonas me imagino especialmente flora exótica, por ejemplo: la Victoria Regia cuya hoja crece al punto de poder resistir 40 kg de peso sobre su diámetro de un metro o más; además, su flor solo dura abierta 24 horas, no todos los días tienes una planta así frente a tus ojos. Atrévete a visitar un bosque amazónico, quédate en silencio mirando las copas de sus árboles, disfruta de los sonidos de las hojas, madera y cualquier crujir generado por las paticas de algún animal, inhala, exhala una y otra vez. ¿Qué sentirás?…Te invito a descubrirlo, no por nada esta zona es el pulmón del mundo, lo que tendrás es la mejor calidad de aire del mundo, ¡solo disfruta!. Inmersión cultural con las comunidades del Amazonas: En Macedonia y Nazareth, comunidades que viven en la rivera del río Amazonas, encontrarás enseñanzas ancestrales que te invitarán a amar la naturaleza y disfrutar momentos sencillos que te hacen feliz. Estas comunidades me enseñaron que le debemos todo a la naturaleza; la comida, artesanías y casas se los proporciona la madre tierra, por ello buscan su protección. Caminando por Nazareth pude apreciar como sus niños son felices con momentos sencillos: como mojarse con el agua de lluvia y sonríen mientras te enseñan a decir “hola o gracias” en su lengua natal, Tikuna. Al hospedarme en Puerto Alegría – Perú, también pude recorrerlo y fue así que me encontré con don Jorge, creador del Museo Wiñay Runacay (en quechua) o “lugar de recreo natural de personas” y me mostró algunas de las tradiciones de la zona. Gracias a él y a lo que viví al hospedarme en el albergue de la zona (Madre Selva o Irapay) pude comprobar la cara bonita de este pueblo, cuyo tesoro es su gente. Mi lema siempre es: aprender de todo y de todos y con estas comunidades no fue la excepción: ¡gracias por tanto! La diversión en el Amazonas: Si quieres cambiar la rutina en la que vives, darle un respiro a tu ser y sacar a flote tu niño interno: ¡Amazonas es la respuesta!. Lo mejor, la diversión será para toda la familia, hay planes que involucran desde el niño aventurero, hasta el abuelo inspirador. Atrévete a subirte a árboles, a cruzar puentes en medio de la selva con pájaros cantando a tu alrededor, a lanzarte en canopy y descender en rapel con la mejor vista posible, éstas son experiencias que no tendrás todos los días y que tu espíritu viajero agradecerá infinitamente. Ésta experiencia completa la realicé en el Hotel Amazon y tiene un costo de $35.000 y dura dos horas aproximadamente. Todo el Amazonas te generará esa sensación de alegría o plenitud que no tendrás a través de la pantalla de un televisor en casa, así que ¿Qué estás esperando? ¡La magia del Amazonas espera por ti para hacerte sentir más vivo que nunca!