Remontando en los principios de la historia, encontramos que el «Viajero» es más antiguo que el «Turista». Los viajeros existen desde la antigüedad debido al crecimiento e impulso de la actividad económica de la Mesopotamia junto con otras regiones del mediterráneo, buscando en sus viajes encontrar mercancías de alto valor o por motivos espirituales y religiosos. 

 

Ahora, un viajero de un turista se diferencia desde diferentes aspectos. El principal es el nivel de expectativa que tiene cada uno y la inmersión que realizan en la comunidad local a donde se dirigen; mientras que el turista tiene una expectativa alta por la nueva experiencia y un bajo involucramiento en la comunidad local, el viajero maneja la expectativa como un imán por lo desconocido, lo exótico y lo nuevo; generalmente busca relacionarse directamente con la comunidad local y conocer su cultura, comprendiendo la vida desde otro punto de vista. 

“La diferencia entre un turista y un viajero es que mientras el primero piensa en regresar desde el mismo momento de su llegada, el viajero puede no regresar nunca.” –Anónimo 

Etimológicamente, el turista proviene del termino tour, siendo una persona que realiza un movimiento expresado en un viaje, que se ausenta durante un tiempo (entre 24 horas y 12 meses) de su lugar de residencia, volviendo siempre a la misma. Visita lugares de acuerdo a su elección, intereses y gustos personales, apoyado por su solidez financiera justificada en sus ingresos por su actividad económica estable e invierte ese dinero en los lugares a visitar. 

 El turista viaja con propósitos diferentes, generalmente viaja con un itinerario determinado, guiado por un plan y esquema general que implica involucrarse en la cultura local de manera ligera o moderada, usualmente el viajero cae en la categoría de trotamundos: es definido como persona que viaja sin plan establecido, sin itinerario, fecha de salida o regreso y sujeto a circunstancias o recursos económicos disponibles, siendo su involucramiento en la comunidad local de un modo muy alto, incrementando el sentido de pertenencia en su viaje. 

 

                  “Los turistas no saben dónde han estado, los viajeros no saben a dónde van.” –Paul Theroux

Ahora, ¿Qué tipo de viajero eres?

 Si eres un VIAJERO, te sentirás identificado con las siguientes características…

 1. Buscan tener una experiencia cómoda. 

2. Prefieren un hotel con todas las facilidades.

3. Quieren ir a restaurantes importantes de la localidad. 

4. Suelen tener un itinerario que deberá ser completado.

5. Desean conocer sitios de interés, culturales y propios de la localidad. 

6. Sin importar su costo, desean realizar un gran viaje al año. 

Mientras que nuestros amigos TURISTAS, suelen ser personas que…

1. Buscan experiencias transformadoras. 

2. Desean conocer gente nueva.

3. Desean compartir y crear momentos inolvidables.

4. Prefieren la aventura y perderse en la ciudad. 

5. Comen en los lugares concurridos por los locales. 

6. Desean vivir en los lugares que visitan, así sea por unos días, semanas o par de meses. 

7. Todo lo anterior no debe ser muy costoso, ya que su expectativa es viajar al menos 3 veces en el año. 

Y tú, ¿Ya sabes que tipo de viajero eres?…

Inicia tu próxima aventura a tu lugar favorito, cotiza ahora. Haz click aquí.